domingo, 28 de agosto de 2011

El camino del ninja

Naruto es un joven ninja amante del ramen, espontáneo y algo insconciente, pero de gran corazón y que valora sobre todo a sus compañeros y a la gente de su aldea, por los que haría todo lo que hiciera falta. Durante tres años fue entrenado por Jiraiya, uno de los tres legendarios sannins, o como a Naruto le gustaba llamarlo el Ermitaño Pervertido, (ya que además de ser un gran ninja era escritor, tanto de novelas de aventuras como eróticas). Además de ser un gran ninja y escribir, Jiraiya estaba obsesionado con una idea, que era la búsqueda de la formula para traer la paz al mundo, de hecho una profecía decía que él entrenaría a un gran ninja que traería una revolución al mundo en este sentido.
Hace unos años entrenó a Nagato, un prometedor ninja con unas capacidades que hace muchas generaciones que no se daban. Nagato al ver la preocupación de Jiraiya le prometió que él intentaría traer esa paz al mundo. Con el tiempo se convirtió en un gran ninja, sin embargo después ver las desgracias del mundo y sufrirlas el mismo, dejó de creer en el hombre y concluyó que la única manera de traer la paz era doblegar al mundo a sus pies para gobernarlo con mano dura.
Con este proposito Nagato destruyó la ciudad de Naruto, matando a varios de sus amigos. Finalmente Naruto se enfrenta a Nagato, y hablan sobre el legado de Jirayia: ¿la paz es posible? ¿cómo se puede conseguir? Nagato cede sorprendido ante la respuesta de Naruto:
Creer ciegamente en ella, y luchar por ello sin rendirse.

No importa que algunos crean que es una utopía, si todos creyeramos en un mundo mejor y trabajaramos por ello, seguro que esa utopía se haría realidad.

Videos tu.tv

domingo, 21 de agosto de 2011

Los Mecanismos Arrugados

Tras varios días dónde el calor no da tregua ni por la noche, aparece un día nublado y lluvioso y es como un bálsamo frente a este agosto pacense. ¿Y qué hacer un día así en verano? Nada mejor que leer, y aquí os traigo mi última recomendación: "Los mecanismos arrugados" del Andrés Trujillo.
En este libro encontramos un conjunto de relatos cortos, dónde contada con una óptica singular nos topamos con la realidad de la calle. Colas del paro, gente que intenta buscar su sitio en esta sociedad o gente que intenta buscar su sitio en una fiesta, parejas enamoradas o parejas que no lo están, o simplemente gente que pasa a tu lado pero que de alguna forma te llama la atención,... Y encajados perfectamente dentro de todo este realismo, no extraña encontrarnos con algún que otro elemento fantástico como puede ser un duende o un superhéroe de la ciudad de Badayork.
De entre ellos os puedo destacar el relato titulado "El sueño parisino de Carlos", dónde en un escenario de posguerra, Carlos deja su pueblo natal para intentar cumplir su sueño, un sueño dónde está el arte, París y la felicidad al lado de un amor platónico.
Si os interesara echar un vistazo a través de este peculiar prisma del mundo, podéis visitar el blog del autor ¿Cómo quieres que cuente estrellas? y poneros en contacto con él o pasaros por alguna de las librerías de la capital pacense.

sábado, 13 de agosto de 2011

En la Riviera Maya



Como algunos ya sabéis hace dos semanas que volvimos de la primera tanda de vacaciones y del viaje caribeño a México. La primera mitad del año nos ha cansado bastante y nada mejor que arena blanca y fina y mares color turquesa, así que decidimos darnos un lujo y nos fuimos a la Riviera Maya una semana.
El hotel elegido fue el Bahía Príncipe Coba, que forma parte de un resort con dos hoteles más (Tulum y Akumal), de los que puedes utilizar todos sus servicios. El resort y las habitaciones en general es muy chulo, con un montón de piscinas, bares y jardines, dónde te puedes encontrar a animales exóticos como mapaches, iguanas o ardillas vagando libremente. De lo tres hoteles el Coba es el que no tiene playa, pero quizás es el que tiene las instalaciones más modernas y amplias, el Tulum tiene una playa con muchas piedras, aunque quizás por eso la playa es muy tranquila, y el Akumal tiene una playa fenomenal, pero claro, allí es dónde va toda la gente del resort y por lo tanto está a tope. En cuanto a la comida y a la barra libre del hotel están bastante bien sin llegar a muy bien.
Aunque en el hotel ya hay playa y toda la comida y bebida que podías querer, en toda la zona del Yucatán hay muchas muchas cosas que se pueden hacer y ver, así que os contaré las excursiones que hicimos, aunque ya os digo hay muchas cosas que no nos dio tiempo a hacer.
Después de pasar el primer día por el hotel, el segundo decidimos ir a la playa de Akumal, a tan solo 8 kilómetros del hotel. Para ir allí cogimos una van o colectivo, que son furgonetas que pasan por la carretera y que constituye el transporte público de la zona. En serio, no es nada peligroso moverse por allí de esta forma (dicho por el propio personal del hotel), y te proporciona una forma barata de conocer muchos de los sitios que hay por allí y que merece la pena. Bien, la playa de Akumal es una playa pública, con poca gente y con un poderoso aliciente: las tortugas. Haciendo snorkel a pocos metros de la orilla puedes encontrarte con tortugas marinas, además de otros animales como rayas. Para mí esta fue una de las mejores experiencias del viaje, y encima gratis :)
Al siguiente día nos tocaba la excursión más lejana que hicimos: Chichén Itza. Las excursiones del hotel son bastante caras, así que este viaje lo contratamos con una agencia de Playa del Carmen llamada InfoCenters. Chichén Itza fue la ciudad más importante de los mayas hace más de mil años y nos encontramos con un gran complejo arquitectónico dónde destaca sobretodo la pirámide de Kukulcan. A la vuelta paramos en el cenote de Ikkil. En el Yucatán parece que la mayoría de los ríos transcurren de forma subterránea , y los cenotes son como grandes pozos de agua que acceden a esos ríos. Después de recorrer las ruinas mayas con el sol pegando fuerte, es estupendo bañarse en las refrescantes aguas del cenote.El cuarto día hicimos otra excursión, esta por nuestra cuenta. El destino fue las ruinas mayas de Tulum. Tulum fue otra ciudad maya, aunque ya de la época de la decadencia maya. Por lo tanto no es tan majestuosa como Chichén Itza, pero tiene su encanto al estar al lado de la playa. Después de esta visita nos fuimos andando a una playa que está a 10-15 minutos andando de las ruinas. No nos quedó claro si se llamaba playa Paraiso o Santa Fe, el caso es que como en el caso de la playa Akumal, en estas playas dónde no hay hoteles es dónde quizás mejor se está. Vale que no hay tumbonas ni cócteles, pero es que sin gente, con unas arenas tan finas y un agua tan limpia no se puede estar mejor. Allí te olvidas por completo del resto del mundo. En esta playa hay unos puestecitos que corresponden a una compañía que realiza visitas guiadas al arrecife de coral mesoamericano, que es el segundo más grande del mundo. Contratamos sus servicios y nos fuimos a hacer snorkel con ellos, mostrándonos los corales y la biodiversidad marina del arrecife... muy recomendable.
El sexto día, nos fuimos a Cancún, en una especie de intercambio de hoteles entre el Bahía Príncipe y el Riu Cancún. Cancún es una especie de Benidorm, hecha para el ocio y la juerga de los norteamericanos. El sitio ideal para irte de fiesta con los amigos. Además de esto, lo mejor de Cancún son sus playas y la tonalidad de azules de sus aguas.
Qué pena que sólo fueran siete días, nos faltaron muchos más para visitar más ruinas mayas, descubrir más cenotes, disfrutar de alguno de los parques acuáticos, buscar más tortugas y peces de colores, o como no, probar más cócteles.....

jueves, 4 de agosto de 2011

Indignado, utopía y esperanza

Hasta hace poco no sabíamos que era la prima de riesgo de nuestra deuda, y hoy es nuestra máxima preocupación. Y es que el país parece que se va a la mierda, y nosotros los de abajo también.
¿Y tenemos la culpa nosotros? Pues en parte sí, aunque no creo que seamos los principales culpables. Nos enseñaron el anzuelo de los créditos, y picamos con mucho gusto, ya que así podíamos disfrutar de una buena casa, un buen coche, grandes viajes, y además jugar a especular comprando viviendas para luego venderlas más caras. ¿Quién iba a decir que no?
Sin embargo los bancos también tuvieron su culpa, ellos prestaron dinero a quien podía no devolverlo. Si yo le presto 1000 euros a un ludopata (por poner un ejemplo), pues corro el riesgo de que no me lo devuelva y debo asumir las consecuencias. Sin embargo los bancos no las están asumiendo.
De hecho, como nuestro estado se comportó como un ingenuo ciudadano más, picó el anzuelo y pidió más crédito del que podía pedir, y ahora los mercados han tomado el control del país (y el Gobierno les ha dejado).
Así que los bancos nos exigirán que les pagemos con creces esa deuda del Estado, y para ello nos esperan unos años canuta. Nos bajarán los sueldos, tendremos que trabajar más años, nos subirán los impuestos, nos recortarán en Sanidad, Educación, ..... Y esto durante unos cuantos años, porque va para largo.
¿Y esto es irremediable? Pues parece que sí, ya que nuestros políticos están vendidos. Si tuvieramos políticos valientes, se reunirían todos ellos (a nivel mundia) y dirían: Vamos a reformar el sistema financiero (ups! creo que esto ya esto ya lo dijeron), la deuda ha sido el problema que ha causado la crisis, vamos a eliminar ese problema, a partir de ahora los estados sólo podrán pedir deuda en casos excepcionales y en dosis pequeñas. Además vamos a hacer borrón y cuenta nueva, y perdonamos los prestamos entre países. (jajajaja, que locura, pero ¿por qué no? sólo perderían los bancos, no la gente).
Sin embargo esto es imposible, ya que ha quedado demostrado que quien manda no son los políticos. Economicamente hablando, el sistema político occidental no es una democracia, es una dictatura cuyo tirano son los mercados. Y a los tiranos hay que derrocarlos....
Para terminar con mejor sabor de boca, quizás sea momento de pensar que a lo mejor con todo esto llega una nueva era en la que haya que quitarle importancia al dinero y a lo material, quizás ahora hubiera que buscar unos objetivos y valores mejores y más humanos. Os dejo con la esperanza de Eduardo Galeano:

PD: Por cierto, he buscado en google imagenes las palabras: indignado, utopia esperanza, a ver si encontraba alguna imagen para ilustrar el blog y me ha aparecido la de abajo, así que desisto.