jueves, 4 de agosto de 2011

Indignado, utopía y esperanza

Hasta hace poco no sabíamos que era la prima de riesgo de nuestra deuda, y hoy es nuestra máxima preocupación. Y es que el país parece que se va a la mierda, y nosotros los de abajo también.
¿Y tenemos la culpa nosotros? Pues en parte sí, aunque no creo que seamos los principales culpables. Nos enseñaron el anzuelo de los créditos, y picamos con mucho gusto, ya que así podíamos disfrutar de una buena casa, un buen coche, grandes viajes, y además jugar a especular comprando viviendas para luego venderlas más caras. ¿Quién iba a decir que no?
Sin embargo los bancos también tuvieron su culpa, ellos prestaron dinero a quien podía no devolverlo. Si yo le presto 1000 euros a un ludopata (por poner un ejemplo), pues corro el riesgo de que no me lo devuelva y debo asumir las consecuencias. Sin embargo los bancos no las están asumiendo.
De hecho, como nuestro estado se comportó como un ingenuo ciudadano más, picó el anzuelo y pidió más crédito del que podía pedir, y ahora los mercados han tomado el control del país (y el Gobierno les ha dejado).
Así que los bancos nos exigirán que les pagemos con creces esa deuda del Estado, y para ello nos esperan unos años canuta. Nos bajarán los sueldos, tendremos que trabajar más años, nos subirán los impuestos, nos recortarán en Sanidad, Educación, ..... Y esto durante unos cuantos años, porque va para largo.
¿Y esto es irremediable? Pues parece que sí, ya que nuestros políticos están vendidos. Si tuvieramos políticos valientes, se reunirían todos ellos (a nivel mundia) y dirían: Vamos a reformar el sistema financiero (ups! creo que esto ya esto ya lo dijeron), la deuda ha sido el problema que ha causado la crisis, vamos a eliminar ese problema, a partir de ahora los estados sólo podrán pedir deuda en casos excepcionales y en dosis pequeñas. Además vamos a hacer borrón y cuenta nueva, y perdonamos los prestamos entre países. (jajajaja, que locura, pero ¿por qué no? sólo perderían los bancos, no la gente).
Sin embargo esto es imposible, ya que ha quedado demostrado que quien manda no son los políticos. Economicamente hablando, el sistema político occidental no es una democracia, es una dictatura cuyo tirano son los mercados. Y a los tiranos hay que derrocarlos....
Para terminar con mejor sabor de boca, quizás sea momento de pensar que a lo mejor con todo esto llega una nueva era en la que haya que quitarle importancia al dinero y a lo material, quizás ahora hubiera que buscar unos objetivos y valores mejores y más humanos. Os dejo con la esperanza de Eduardo Galeano:

PD: Por cierto, he buscado en google imagenes las palabras: indignado, utopia esperanza, a ver si encontraba alguna imagen para ilustrar el blog y me ha aparecido la de abajo, así que desisto.

1 comentario:

L. de Guereñu Polán dijo...

Me permito volver a este asunto de la crisis que padece el mundo occidental. En mi blog poiopoio.blogspot.com tengo dos artículos (o tres) que pueden servir para debatir en relación a lo que tú planteas: uno se titula "Contradicciones del capitalismo (que no son pocas)", otro "¿El gran festín?" y otro "Los desvalijadores de cajas". Si te aburres puedes leerlos. Un saludo.